7 Brothers – Golfo de Goubet – Lago Abbe – Lago Assal
2.080€
Buceadores y no buceadores vivirán una auténtica aventura.
Yibuti, un pequeño país perdido en un rincón perdido del planeta, siempre queda alejada de los focos mediáticos, con la mochila bien cargada de clichés y de leyendas, que le otorgan una imagen cruda e inhóspita, algo así como un tórrido infierno de guijarros poblado por primitivas y belicosas tribus.
Pero como acostumbra a ser habitual, nada más lejos de la realidad.
Yibuti es una tierra de intercambios y de encuentros, cuyas raíces están arraigadas en lo más lejano de la humanidad, habitada aún por pueblos nómadas con una cultura de la hospitalidad lejos de la que nosotros podemos llegar a imaginar, y que alberga, en un espacio no mucho mayor de lo que ocupa Galicia, todo un laboratorio natural sin igual, donde se ubican lugares geológicos extraordinarios, únicos en el mundo, paisajes fascinantes a la vez que extraños, más propios de planetas lejanos que de nuestra Tierra.
Y si por encima de la superficie es un lugar extraordinario, por debajo de ella que os voy a contar…
Imaginaros el buceo en el Mar Rojo hace 40, 50, 60 años. Completamente solos, sin nada ni nadie a nuestro alrededor, solo acompañados por todos los secretos que el Golfo de Adén nos quiera desvelar.
Por todo esto, queremos que este viaje sea una declaración de intenciones de lo que representa para La Plataforma del Buceo viajar, una forma de descubrir esos rincones del globo que aún esconden maravillosos secretos que solo le serán desvelados a aquellos viajeros que den un paso más allá y dejen atrás, aunque sea por unos días, los circuitos habituales para dar un paso más allá y sumergirse, nunca mejor dicho, en lo desconocido.
Por eso nuestro viaje empezará con 6 días y 7 noches de Vida a Bordo en el M/Y Alia, un moderno yate que nos llevará al lejano e inhóspito archipiélago volcánico de los Siete Hermanos, ubicado en medio del estrecho de Bab el-Mandeb, que separa el continente africano con la península arábiga y que es la puerto de entrada al Mar Rojo, y en donde los buceadores disfrutarán de unos fondos primigenios, sin alterar, acompañados de una abundante fauna marina, junto con delfines, tiburones grises y móbulas, mientras que aquellos que no buceen podrán desembarcar en alguna de las islas deshabitadas del archipiélago, forjadas a base de leyendas por los marineros que por ellas pasaron.
Pero sin duda si hay algo en el Mar que solo podamos encontrarnos allí es el fenómeno que ocurre en el Golfo de Goubet, casi una laguna tierra adentro, y que en los meses de invierno (diciembre – febrero) recibe la visita de decenas y decenas de Tiburones Ballena, con los que pasaremos varios días haciendo esnórquel y buceando, en este curioso y único lugar.
Se trata de una de las mayores concentraciones del planeta de estos animales, pudiéndose juntar al mismo tiempo, con suerte, grupos de varias decenas de ejemplares, pero que muy poca gente conoce debido a que no tiene ni el nombre ni la fama de otros destinos mucho más trillados como Maldivas o, más recientemente, la Baja California Sur.
Un espectáculo de la naturaleza que podremos vivir en primera persona y que de bien seguro jamás vamos a olvidar.
Una vez de nuevo en el Puerto de Yibuti, desembarcaremos con los primeros rayos de sol y nos subiremos en nuestros 4×4 para dirigirnos hacia uno de los lugares más inhóspitos del planeta, el Lago Abbe, cruzando interminables extensiones de arcilla blanca, solo habitada por gacelas y chacales, hasta llegar al punto donde empieza el Valle del Rift, y en donde se puede admirar un verdadero bosque de chimeneas de piedra caliza rodeadas de piscinas de agua burbujeante y sulfurosa. Además, acamparemos a orillas del lago, para vivir un atardecer y un amanecer que no olvidaremos jamás.
Al día siguiente, después de visitar las enormes colonias de Flamencos que pueblan el Lago Abbe, nos dirigiremos hacia el Lago Assal, el punto más bajo de África (150 metros por debajo del nivel del mar), y el punto por el cual este continente se está resquebrajando: Situado en la que se conoce como depresión de Afar, es el lugar en donde las placas tectónicas africana y arábiga se están separando, a razón de unos 2 cm cada año y de forma, por supuesto, totalmente irreparable.
Se de un lugar rodeado de volcanes y de lava negra como el carbón, pero que contrasta enormemente con el brillante blanco que desprenden las salinas que hay ubicadas en su interior, en donde veremos también, con suerte, las caravanas de camellos que se forman para extraerla y llevarla hasta Etiopía, donde es vendida.
Un viaje, como veis que, de bien seguro, se va a convertir en una aventura que no vais a olvidar jamás.
Día 1: Desde el aeropuerto, nos trasladaremos a la ciudad de Yibuti , donde pasaremos el día visitando la ciudad o, quien lo desee, en una Beach House a pie de playa, esperando la hora de embarcar en el M/Y Alia, que será sobre las 17:00 de la tarde.
Día 2: Saldremos de puerto con destino a las Islas Moucha, donde los buceadores podrán realizar dos inmersiones. Por la tarde, navegación hasta las lejanas 7 Brothers (7 horas).
Día 3, 4 y 5: Durante estos 3 días se propondrán algunas de las mejores inmersiones de Yibuti alrededor del archipiélago de las 7 Brothers, casi siempre acompañados de delfines.
Día 6 y 7: Ya en el Golfo de Goubet, disfrutaremos de interminables sesiones de snorkel con los tiburones ballena que allí se congregan, así como otras inmersiones imprescindibles, en la que muy posiblemente también disfrutaremos de la compañía de estos gigantes del mar.
Día 8: Después del desayuno desembarcaremos para dirigirnos hacia el Lago Abbe en 4×4, donde nos espera un paisaje marciano, rodeados de chimeneas y fumarolas, entre las que pasaremos la noche para disfrutar de un atardecer inolvidable.
Día 9: Después de visitar el Lago Abbe y sus colonias de flamencos, nos dirigiremos hacia el Lago Assal, el punto más bajo de África, donde el contraste del negro de la lava volcánica con el resplandeciente blanco de las salinas que hay en su interior solo es roto por las caravanas de camellos que lo cruzan, tal y como se lleva haciendo desde hace siglos.
Por la tarde, vuelta a Yibuti City y vuelo de vuelta a casa.
Si quieres reservar o solicitar más información, solo tienes que decirlo…
